¿Cómo has estado?

Hola, no sé si es la primera vez que te veo.

Es que te explico, soy algo malo con los rostros, y disculpa si interrumpo tu almuerzo, pero se me hizo muy familiar tu mirada. 

No te asustes, me presentaré. Mi nombre es Lucas, tengo 21 años y no tengo nada en mi bolsillo salvo mi celular y un manojo de llaves. Juro no tener un arma. Por eso dije que no te asustaras.

¿Puedo sentarme aquí contigo? Gracias, eres muy amable. 

Aún no dices palabra alguna, así que seguiré hablando...

Tu mirada me parece haberla visto en alguna parte, pero no sé en donde o cuando. Es extraño, nunca antes me había pasado. Pero por lo menos, ¿Podría saber tu nombre?

...

Ésta bien, parece que será como un monólogo. Aún no sé tu nombre, y no sé si en algún momento llamarás a seguridad. Solo quiero asegurarme de recordar quien rayos eres, por que  de verdad me mata no poder recordar a alguien. Verás, tengo una facilidad de entablar un diálogo pero no creo que pueda parar ésta vez. ¿Por que no dices palabra alguna? ¿Pasa algo? ¿O es que ya recordaste quién soy y no deseas decírmelo? ¿Te hice daño alguna vez? ¡Vamos mujer di algo!

—...

¡Genial! ¡Estupendo! ¡Glorioso!, no sabes quién rayos soy, ni yo sé quien rayos eres tú. Entonces dice mujer de mirada familiar... ¿Por qué diantres te me haces conocida? ¿Es acaso que pasamos una noche juntos y prometimos no decir nuestros nombres? ¿Alguna vez me viste bailar tango con mi perro? ¿Me viste en el estadio? ¿Crees que soy agradable?

— ...

Entiendo que no desees hablar, pero por lo menos suéltame un dato, una fecha, un día, cuándo nos conocimos. ¡Estoy seguro que te conozco! ¿Alguna vez te besé? ¿Algún amigo nos presentó en una fiesta en la que ambos estábamos presentes y ebrios? ¿Salía con tu hermana? ¡Dios Santo! ¿Es que acaso eres muda? ¿Tu mamá no te enseñó a presentarte? ¿Por qué estás tan quieta? ¿Por qué hago tantas preguntas?

Muy bien, muy bien. Ya entendí, no hablarás. No dirás nada, así que por el resto de tu almuerzo yo me sentaré aquí, te miraré a la cara mientras comes y trataré de recordar quién eres, también intentaré descifrar por qué tu presencia me perturba. ¿Pero no tendría por qué perturbarme verdad? Yo fui el que vine, yo me senté aquí. Si deseo puedo pararme de ésta silla para poder seguir con mi rumbo... Espera... ¿A dónde iba? ¡Cristo redentor! ¡Hasta ya hiciste que olvidara eso! ¿Y si era importante? ¿Te das cuenta de lo que causas?

¡PERDÍ EL RUMBO! ¡Alguien deme una brújula por favor! ¿Nadie? ¿Nadie tiene un reloj? 

mmmdnnnjd...

¿Dijiste algo? ¿Has murmurado? ¿Por fin tengo tu atención? Vamos, ten algo de cordura y háblame, di una palabra. 

—...

¿Así que te quedarás callada de nuevo? ¿Verdad? Maldita muda. Tu cara parece muy lisa, muy fina. Muy perfecta. ¿Qué crema usas? Hueles bien. Tu olor. Tu olor, lo recuerdo. ¿De dónde...? ¿De dónde eres? Tu piel es muy clara, casi pálida. ¡Oh Dios! tus manos, tus manos son muy resecas. ¿Por qué no comes? ¿No tienes hambre? ¿Lucas te está incomodando? 
¿Le digo que se vaya? ... Lucas es muy perverso para molestar a la gente. Lucas es torpe y desatento. Lucas habla demasiado. 


Tu brazo, ¿Acaba de caerse acaso? ¡Dios! ¿No te duele? ¡Te has quedado sin brazo mujer!

No dirás nada... lo sé, te quedarás callada. 

Siempre optaste por el silencio, ya sé... ya recordé quién eres, y sé que lo que estoy viendo no eres tu. Eres alguien más. ¿Quién eres? ¿Por qué la imitas? 

Tu nunca fuiste buena compañera. ¿O el mal compañero era yo? ¡Imposible! Todos disfrutan de la compañía de Lucas. ¡Todos! 

Alguien toca la puerta, será hora de irme. El restaurante está vacío y tu no dices palabra alguna. Sigue sentada, iré con el hombre de traje blanco, apagaré la luz, guardaré el plato. Has hecho enfriar la comida. Eso no se hace mujer de ojos desorbitados. Eso no se hace.

Volveré pronto, el hombre de traje blanco tiene comida, te traeré más. Para ambos, ahora solo descansa, verás tu como recoges tu brazo. Verás que el hombre de traje blanco nos ayudará. Solo ...


Solo...

Solo ... quédate ... aquí. Si ... aquí, con la luz apagada. 

¿No tienes manos para prenderla? ¿O si?  

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