Sin optimismo...

Días Vacíos

¿Alguna vez les ha pasado en su vida que se despiertan y no tienen ganas ni de abrir los ojos?. Pues, me ha sucedido casi a diario durante todo éste año. Es poco común, de naturaleza soy una persona optimista, bromista, buena onda; pero durante el 2012 he dejado salir mi lado más recio, molestoso, cagón, apartado, solitario, deprimido, etc.

Hablando con un amigo de hace muchos años, me dijo que me notaba cambiado, como el me lo dijo: "Menos entusiasta". No lo pude creer. Pero luego en el regreso a casa, me daba cuenta que es cierto. Hace un poco más de un año era un chico totalmente distinto. 

Así que, tomé en retrospectiva mi vida y me dije a mi mismo: "¿Por qué diablos ando más aburrido que de costumbre?". Encontré la respuesta en un momento de soledad con mi guitarra. "¡NO HAGO COSAS NUEVAS!". Si bien, cada día es único en su especie, el último año fue un poco más de lo mismo. Enamorarse, componer, redactar, tocar guitarra. Nada realmente nuevo. 

Entonces, decidí de todas formas aprender a tocar bien el piano, a leer muchos más libros que los acostumbrados, a ser un mejor estudiante, a preocuparme por mi, más que por el resto lejano (Quiero decir, que sólo me preocuparé de las personas cercanas a mi entorno) ¿Los demás? ¿Dónde está la actitud del psicólogo a futuro? ¿Dónde queda todo lo antes valorado por otras personas? ¿Dónde queda la actitud comprensiva? ¿Dónde queda el chico romántico y cariñoso? ¿Dónde queda el Diego que estuvo durante el último año?

Todo eso queda en un lugar muy, muy muy profundo en mi corazón. En un lugar protegido y acorazado de las bacterias que expulsan las personas envenenadas con la actitud negativa y sin ganas de vivir o "activarse". 

Luego de esa extirpación de virus... éste adolescente/adulto joven/inmaduro empezará un nuevo mes con una actitud totalmente distinta de la de los últimos 12. Totalmente distinta, un cambio radical. Una fusión de ese niño introvertido y el puberto extrovertido, una combinación del despiadado y cruel adolescente con el tierno, cariñoso, amable y atento niño. Un híbrido de la música clásica y moderna en parte. Una fundición de las buenas y malas costumbres. Una agrupación de curiosidad y respeto hacía cosas que no me importan. 

Es decir, empezar a formar a esas 6 personalidades en una sola. Compacta, firme, cambiante, elocuente, alentadora, activa, humilde, MADURA.

Los días de vez primera empezaron oficialmente. (¡Que hagan una ceremonia con fuegos artificiales y Paul McCartney cantando "Hey Jude"!) (Todo eso en mi mente claro, están cordialmente invitados.) (Las entradas se venden en mi lóbulo occipital, en la tercera boletería.) (No puedo dejar de escribir entre paréntesis) ( Alguien deténgame) (Un corte de luz sería genial).